El abordaje del sistema familiar es necesario en situaciones en que la comunicación entre los miembros está interrumpida o existen conflictos no resueltos, problemas de conducta en los/as hijos/as, problemas escolares, adicciones. La intervención familiar ayuda en la búsqueda de soluciones, mejora la comunicación y el respeto. Sirve como apoyo emocional y análisis de las dinámicas que llevan al conflicto. Facilita el camino para establecer nuevas normas de convivencia, límites personales, hacer tratos y adquirir compromisos. Fomenta la reparación de heridas y limpieza de reproches proponiendo la vivencia de momentos agradables y actividades conjuntas.